"Algún día en cualquier parte, en cualquier lugar indefectiblemente te encontrarás a ti mismo, y ésa, sólo ésa, puede ser la más feliz o la más amarga de tus horas"
Pablo Neruda (1904-1973)
Poeta chileno.
Semana de fiestas y resúmenes que nos traen los diferentes momentos estelares del año. De la parte pública ya se encargan las tvs, newspapers y social media de ponernos al día con la más impactante noticia, quién nos ha dejado, la catástrofe del año, el cantante que más triunfó, el personaje que más robó y más, más y más...
Pero en la parte privada, o sea, en cada casa de los ciudadanos de a pie nos toca hacernos nuestro propio resumen de lo acontecido en este ya casi extinto 2014. Como siempre, debe haber habido de todo, como en botica. Pero no es malo refrescarnos a nosotros mismos la memoria y ser capaces de desgranar cuantos acontecimientos nos han ocurrido (sobre todo los que pintan en positivo) y ser capaces de poner en orden todo lo que nos ha ayudado a crecer a través de estos episodios vividos con y para los nuestros.
Ya tocará iniciar el nuevo año con los propósitos y objetivos, a veces distintos, a veces renovados, como un nuevo intento de afrontar algunos retos convertidos en auténticos ogros inalcanzables.
Pero entrando en materia mi planteamiento cuestiona la posibilidad de poder llegar a establecernos una metas, y por supuesto iniciar un plan de acción que nos conduzca a las mismas, sin antes tener muy claro en la situación en la que nos encontramos ahora mismo en nuestras vidas. Además, una vez evaluada la situación actual, el punto de partida, la posición de salida de nuestra nueva carrera a disputar en el año entrante, debemos decidir cuales son nuestras necesidades en la misma, y en base a ellas establecer los objetivos. Dicho de otro modo, antes de pasar a la acción tenemos que tomar conciencia de aquellos aspectos que necesitamos modificar para lograr la felicidad en algunas cuestiones de nuestra vida que nos ayudaran a nuestro desarrollo personal.
Y nada mejor para evaluar nuestro momento, el momento presente, como utilizar una herramienta tan útil como sencilla como es la llamada rueda de la vida. La misma, de forma gráfica se divide en ocho áreas y cada una de ellas se divide desde el centro de la circunferencia hasta el final de la misma en cinco niveles, correspondiendo cada uno de ellos al grado de satisfacción que presentamos en cada área. Personalmente a mí me gusta hacer en paralelo dos ruedas, la actual y la futura, de tal manera que una vez al año mido en dónde me encuentro y lo contrasto con dónde me gustaría estar. Además, siempre guardo la del año anterior pudiendo de esta forma saber mi evolución y os aseguro que ocurre como con los niños en casa ajena, y es que aunque pensamos que no cambiamos nunca, o lo hacemos poco, ejercicios como este provocan una gran alegría al evidenciar mejoras notables (casi siempre) que te motivan para continuar realizándolos una vez más.
Existen muchos modelos de la rueda de la vida, por lo que os dejo un ejemplo en forma de lista a continuación:
- Entorno físico.
- Relaciones.
- Ocio.
- Desarrollo emocional.
- Dinero.
- Amigos, familia, socios.
- Trabajo.
- Salud.
Una vez puntuado del uno al cinco cada uno de los aspectos de la rueda (el centro significa "muy insatisfactorio" y el extremo representa "totalmente satisfactorio"), el resultado nos ha dibujado en forma gráfica como nos sentimos en el momento actual y permite que visualicemos nuestro grado de satisfacción en los distintos aspectos de nuestra vida. Ahora nos toca concentrarnos en cómo conseguir nuestra realización personal enfocándonos en las áreas a mejorar, eso si, sin descuidar los aspectos que puntuamos con alta satisfacción.
Lo mejor, una vez generada la rueda de la vida de nuestro particular 2014, es tomarse un tiempo para decidir cual o cuales serán las áreas prioritarias (según cuentan los expertos, una o dos, a lo más) a afrontar como reto para el 2015.
Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 3 minutos a ver el siguiente vídeo que incorpora otra visión más intuitiva que todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.
Nota: Pues esta semana tenemos un método analítico exploratorio mezclado con el vídeo que nos deja algún consejo sobre las intuiciones en la toma de decisiones. Ahora os toca a vosotros, ¿os atrevéis? FELIZ SALIDA DEL AÑO 2014.