"Hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces, pero no hemos aprendido el arte de vivir juntos, como hermanos"
Tras el exámen del lunes, una semana tranquila ha pasado como un rayo en mi vida. Si, hemos cambiado de mes y ahora nos vamos a la semana previa del Carnaval de mi segundo pueblo, Herencia. Lo siento como mi pueblo, ya que consume la mayoría de mis horas de vigilia, y al final la vida la vives durante la misma, ¿no?. Aun así, sigo empadronado en donde duermo y a mucha honra, por cierto.
Bueno, pues dicho lo dicho, no puedo pasar por alto esta semana nuevamente el malestar que ha dejado la forma de timarnos que en este País tienen los cargos políticos, se disfracen del color que se disfracen. No sólo abusan y mal usan las subvenciones que llegan a sus cajas de manera fraudulenta, sino que además tienen la desfachatez en nuestra cara de tras haber estado durante años viviendo de cobros ilegales y suculentos negarlo una y otra vez y retar a la justicia a que demuestren la evidencia de algo que inevitablemente no se puede ocultar.
Parece difícil, pero en medio de esta crisis de identidad democrática que atraviesa este nuestro país, aún quedan muchos (así lo pienso y quiero pensarlo) ciudadanos que dentro de sus limitaciones piensan en AYUDAR A LOS DEMÁS, y en definitiva en convertirse en anónimos SOLIDARIOS.
Para mí, personas como mi prima, profesional a la vez que amistosa, fraternal, desprendida y una persona que ha demostrado compartir y por qué no, arriesgar para sentir en sus carnes lo que significa ayudar a personas que no tienen todos nuestros privilegios y la suerte de vivir de una forma digna, sin pasar hambre y necesidades, es alguien que admiraré para siempre durante toda mi vida.
Por esto, esta semana no puedo reseñar nada de lo que me ha ocurrido a mí, ya que no puedo parar de pensar cuantas y cuantos voluntarios existen en estos momentos por el mundo ayudando a mucha gente que lo necesita a cambio de nada. Sólo por el hecho de sentirse bien con ellos mismos y orgullosos de hacer y procurar lo mejor para niños y mayores de países menos favorecidos que el nuestro que les necesitan se merecen mi admiración.
Gracias a estas ONG's, gracias a los cooperantes y gracias a todos los que desde sus casas y con sus donaciones pueden hacer posible que poco a poco, países con problemas puedan evolucionar y hacer felices a los ciudadanos que viven en ellos.
En el caso de mi prima HERMANA (con mayúsculas a propósito, tú lo sabes por qué), son un equipo de 18 personas que sin tiempo de casi dormir, llevan operando en Nicaragua a muchas personas que lo necesitaban, acompañados de médicos y cirujanos del lugar, poniendo su granito de arena en la elevación del nivel de vida de estos pacientes y los conocimientos de médicos y cirujanos de éste país que necesitan este apoyo tan importante de "Médicos sin Fronteras".
Nuevamente, GRACIAS, necesitamos mucha más gente como vosotros y a la vez hacer desaparecer Ladrones Públicos de nuestra tierra; mucho, mucho, mucho mejor nos iría tanto a nosotros como a nuestros predecesores.
Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 2 minutos a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.
El vídeo de la semana:LAS PASTILLAS DE LA SOLIDARIDAD
NOTA: MAPI Y ANABEL, desde la comodidad de mi sillón y empequeñecido ante vuestra obra sólo deciros una cosa: ¡¡¡DE MAYOR QUIERO SER COMO VOSOTRAS!!!
Hola Edu, aquí estoy con retraso pero siempre aquí.
ResponderEliminarUn buen homenaje a la solidaridad, por suerte todavía hay mucha gente solidaria en España.